Las exportaciones de Japón, como ya sabemos, se vieron afectadas, cuando se trataba de alimentos mas que nada.. La explicación es el simple temor por parte de los países importadores, a que se contraiga contaminación nuclear.
Ante este masivo bloqueo de los productos, varios mandatarios y voceros salieron a pedir, a modo de favor, que se levanten las trabas. Asegurando la total descontaminación de los bienes vendidos.
Tanto Brasil como Bolivia, siendo el primero un importante comprador, cerraron sus puertas y se esperan futuras negociaciones para solucionar el tema. Desde Japón se piensa que dichas negociaciones apuntaran a temas ajenos a la situación actual, y que no se podrá evitar la intención de obtener algún beneficio, en otros aspectos, aprovechando la situación y como compensación del “favor” de adquirir los productos de Japón.